Creo que es más fácil y cómodo para nosotros recibir el perdón de Dios que el perdonar a otros. Creo que aún existe mucho orgullo y egoísmo en nuestro interior, que nos hace creer merecedores pero no dadores de perdón. Señor cambia nuestros engañosos corazones para que cada vez más se nos facilite el perdonar a otros, así como Tú nos perdonaste y continúas haciéndolo cuando vamos a ti arrepentidos a implorar tu perdón. En el nombre de Cristo, amén.
Bendiciones, Gracia y Paz
No hay comentarios:
Publicar un comentario