viernes, 20 de noviembre de 2015

DECLARAR, CONFESAR, DECRETAR

Más o menos, desde la década de los 90 se ha infiltrado en la iglesia cristiana una falsa doctrina (bastante atractiva, pero anti-bíblica), que consiste en otorgarle cierta importancia sobrenatural a las palabras pronunciadas.

A manera de entrevista, se ilustrará el tema.

Antonio : Bienvenido Luis a nuestro programa de hoy “preguntas y respuestas”. Te agradecemos que hayas aceptado nuestra invitación.

Luis: Gracias Antonio a ustedes por haberme invitado y espero que este programa sea de edificación para todos aquellos que quieran conocer la verdad.

Antonio: Bueno, entremos en materia. En nuestro programa de hoy trataremos el tema acerca de esta ola de confesiones positivas, de declarar la Palabra de Dios en contra de cosas negativas, que se ha vuelto muy popular dentro de los cristianos. Qué dice la Biblia al respecto?

Luis: Pues Antonio, se dicen muchas cosas y se escuchan tantas otras. Pero la verdad es que todo aquello que no tenga sustento bíblico, es decir que pueda probarse a través de las Sagradas Escrituras, no proviene de Dios y es mejor apartarse.

Antonio: Luis, lo que se afirma dentro del ámbito cristiano es que el utilizar la Palabra de Dios, pronunciando ciertos versículos bíblicos, trae cosas positivas a la vida de quien lo hace, aún en contra de cosas negativas. Por ejemplo: es muy común escuchar que cuando un cristiano acude al médico y le dan un diagnóstico negativo, la primera reacción del paciente cristiano es cancelar esas palabras en el nombre de Jesús, no aceptar el dictamen y declarar sanidad por las llagas de Jesús. Realmente esto sirve de algo?

Luis: Sólo quiero decirte que si eso sirviera de algo, no habría necesidad de médicos, ni medicamentos, las clínicas simplemente no tendrían razón de ser. Y lo peor de todo, no necesitaríamos a Dios para nada, si con el simple hecho de “declarar”, “confesar”, “cancelar”, “decretar” lográramos todo cuanto queremos. La utilización de estas palabras y su promoción y aceptación por parte de algunas iglesias cristianas, además de su práctica recurrente, más se asemeja a lo esotérico que a lo divino.

Antonio: Pero también dicen, que no hacerlo es falta de fe, ya que por fe es que se realizan todas estas “confesiones” y “declaraciones”.

Luis: De eso no se trata la fe; o por lo menos no demuestra una fe genuina en Dios nuestro Padre; sino una fe en las palabras que la persona pronuncia, lo cual es muy distinto. En la Biblia se menciona el hecho de “confesar con la boca”, pero lo que se debe confesar es que Jesucristo es el Señor, su obra salvadora, (Ver Romanos 10:9; Mateo 10:32; Lucas 12:8), habla también de confesar nuestros pecados (Ver 1 Juan 1:9; Mateo 3:6). Debemos ser positivos y creer que Dios nos ama y desea lo mejor para nosotros. Pero con esta doctrina, las personas se han acostumbrado a estar declarando, decretando, anulando y confesando, sin tomar en cuenta la voluntad de Dios y su soberanía; como si EL dependiera de nosotros y no al contrario, como es el orden natural.

Además, la Palabra dice en Romanos 10:17 Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios. No por las palabras pronunciadas por una persona.

Jesús también dijo: “No ruego que los quites del mundo, sino que los guardes del mal. No son del mundo, como tampoco yo soy del mundo. Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad.” (Juan 17:15-17).

Es una realidad que no podemos eludir, estamos en el mundo, tal como Jesús alguna vez estuvo; sin embargo, El nunca perdió de vista lo verdaderamente importante, la vida espiritual por encima de lo material; así nosotros no debemos vivir como las personas del mundo, preocupados por todo lo físico, lo material, sino cultivando una vida que agrade a Dios, preparándonos para la venida de Jesús. Pero al ser bombardeados con tanta información nociva e irreal, vivimos en un mundo de fantasía, teniendo grandes sueños, pensando en grande, viviendo como hij@s del Rey, según los principios del Reino (cuál reino? El de las tinieblas o el Celestial?) porque según los que sostienen esta doctrina, Dios quiere lo mejor para nosotros; entonces vivimos creyendo únicamente en lo tangible y por el mismo motivo, adaptamos y adoptamos las Escrituras para todo lo material, cuando en ellas, todo es espiritual, pues son inspiración divina. Pero escuchamos lo que queremos escuchar, lo que es dulce y agradable a nuestro oído. Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias, y apartarán de la verdad el oído y se volverán a las fábulas. (2 Timoteo 4:3-4).

Así, cuando Dios en Jeremías 29:11 dice Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis.

Y en Hebreos 11:1 Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve.

2 Corintios 5:1-10. Porque sabemos que si nuestra morada terrestre, este tabernáculo, se deshiciere, tenemos de Dios un edificio, una casa no hecha de manos, eterna, en los cielos…. Y por esto también gemimos, deseando ser revestidos de aquella nuestra habitación celestial; pues así seremos hallados vestidos, y no desnudos. Porque asimismo los que estamos en este tabernáculo gemimos con angustia; porque no quisiéramos ser desnudados, sino revestidos, para que lo mortal sea absorbido por la vida. Mas el que nos hizo para esto mismo es Dios, quien nos ha dado las arras del Espíritu. Así que vivimos confiados siempre, y sabiendo que entre tanto que estamos en el cuerpo, estamos ausentes del Señor (porque por fe andamos, no por vista); pero confiamos, y más quisiéramos estar ausentes del cuerpo, y presentes al Señor. Por tanto procuramos también, o ausentes o presentes, serle agradables. Porque es necesario que todos nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo, para que cada uno reciba según lo que haya hecho mientras estaba en el cuerpo, sea bueno o sea malo.

Como vemos, Dios no está hablando de nada material, porque cuál es la mayor y más grande esperanza de un cristiano? La venida de Jesús nuestro salvador y la vida eterna con El. Eso es la fe. Estar absolutamente seguros y confiados de que este mundo y esta vida son temporales y por consiguiente, todo lo que hay en ellos también. Y que junto a Dios nos espera una vida mejor y eterna. Lo esperamos seguros, aunque no lo veamos.

Lo más triste y peligroso de todo esto, es que no tiene ningún soporte bíblico y sin embargo, se ha propagado tanto y ha tenido una enorme aceptación al interior de muchas de las comunidades cristianas porque infortunadamente alimenta la carne, el ego, y eso es mejor que negarse a sí mismo, tomar la cruz y seguir a Jesús, menguar para que El crezca, vernos como realmente somos. A quién le gusta eso?

Esta doctrina incita a los cristianos a negar el dolor, rechazar o desconocer cualquier cosa que resulte molesta: Si no tengo dinero, no debo decirlo porque soy hij@ de un rey que es el dueño del oro y la plata. Si estoy enferm@, no debo decirlo ni mucho menos aceptarlo porque por sus llagas fuimos sanados.!!!

Jesús dijo: “Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.” (Juan 16:33).

Como ven, Jesús no les dice a sus discípulos que tendrán una vida agradable, llena de prosperidad económica, sanidad y felicidad. Les dice que mientras estén en el mundo, tendrán aflicción; pero que pueden estar tranquilos y confiados, porque el enemigo ya fue vencido por El.

Otros versículos que son muy utilizados para apoyar esta doctrina de decretos, declaraciones y confesiones por fe, son Marcos 9:23 “al que cree todo le es posible”. Dentro del contexto de este versículo, Jesús viene probando la fe de sus discípulos y hace que tanto ellos como el padre del muchacho se cuestionen acerca de su propia fe en el poder y la Gracia de Dios; pero no significa que lo que cualquier persona crea, automáticamente será posible. 

Esto se trata de si realmente nosotros nos aventuramos a creer en el poder de Dios, en que El puede hacer todas las cosas (no que las hará porque nosotros queremos y creemos).

Mateo 17:20 Jesús les dijo: Por vuestra poca fe; porque de cierto os digo, que si tuviereis fe como un grano de mostaza, diréis a este monte: Pásate de aquí allá, y se pasará; y nada os será imposible. Jesús habla de la fe verdadera, proveniente del sometimiento a Dios y Su voluntad; por eso en Marcos 9:29 habla de oración, una manera de conectarnos efectivamente con nuestro Padre Celestial y demostrar total y completa dependencia de El.

Antonio: Muchas gracias Luis por explicarnos tan claramente y a la luz de las Escrituras este tema tan controversial.

Luis: fue un gusto poder servir, primeramente a Dios y a todos aquellos que leerán este contenido para aclarar sus dudas y conocer la verdad.

Bendiciones, Gracia y Paz

2 comentarios:

Unknown dijo...

Cierto;precisamente hablabamos con mi esposo e hijas al respecto, y o sorpresa cuando nos fuimos a investigar al respecto no hay soporte biblico, pero si lo hacen los Santeros y brujos quienes declaran unas palabras y versiculos biblicos para que rijan durante el tiempo que viene, cualquier parecido a la.realidad en.las llamadas iglesias de.la.vision.

Unknown dijo...

Muchísimas gracias Varón de Díos!